Termitas en verano, ¿más o menos riesgo?

¿Hasta qué punto son un problema las termitas en verano? Esta estación es sinónimo de calor, vacaciones y, para muchas personas, mejoras en el hogar. Sin embargo, también es una de las épocas más propicias para la aparición de estos insectos. 

Estos diminutos pero dañinos insectos causan estragos en las estructuras de madera y ponen en jaque la integridad de viviendas y edificaciones. ¿Cómo podemos evitarlos durante el período estival?

¿Hay mayor riesgo de termitas en verano?

De manera sintética y directa, la respuesta es sí. Estas fechas constituyen un período de mayor actividad para estos animales, especialmente en climas cálidos y húmedos. Durante esta estación, muchas especies de termitas aladas —también conocidas como reproductoras— emergen en busca de nuevos lugares para establecer colonias. Es la fase conocida como enjambrazón, que suele ocurrir entre la primavera y el verano. Como consecuencia de ello, estos meses se convierten en el periodo de mayor riesgo para la aparición de una plaga de termitas en nuestras viviendas o espacios de trabajo.

Ciertamente, el clima estival —caracterizado por altas temperaturas y humedad— es idóneo para que se reproduzcan y se expandan sus colonias. Por otra parte, la existencia de más personas haciendo reformas o cerrando sus casas por vacaciones y el descenso de la vigilancia favorece la introducción de termitas sin que sean detectadas. 

Se une, además, que la madera seca o húmeda sin tratamiento adecuado es el entorno perfecto para el trabajo silencioso y destructivo de estos insectos.

Por lo tanto, tenemos que permanecer atentos a los signos de infestación en verano, porque la posibilidad de una plaga de termitas es mayor que en otras estaciones del año.

Cómo combatir y evitar las termitas veraniegas

Prevenir y combatir termitas en las fechas estivales requiere combinar vigilancia, mantenimiento adecuado y, en algunos casos, intervención profesional. Estas son las medidas clave para evitar que una plaga de termitas se apodere de tu hogar:

• Inspección periódica. Hay que revisar a menudo las zonas del inmueble donde haya madera expuesta, especialmente sótanos, áticos, marcos de puertas y ventanas. Los signos o indicios que hay que buscar son túneles de barro, madera hueca o alas caídas.
• Ventilación adecuada. La humedad es una gran aliada de estos enemigos vivos. Por ello, es preciso asegurarse de que las áreas cerradas de la vivienda están bien ventiladas para evitar su acumulación.
• Tratamiento preventivo de la madera. Aplicar productos antitermitas a vigas, suelos y otros elementos estructurales de madera suele ayudar a repelerlas antes de que sean un problema.
• Eliminación de fuentes de alimento. Almacenar madera, cartón o restos vegetales cerca del inmueble siempre es peligroso. Son alimentos que pueden atraerlas.
• Asistencia profesional. En cuanto se sospecha de una infestación, al más mínimo indicio, lo mejor es acudir a especialistas en control de plagas. En Iluro Plagas contamos con los productos y técnicas necesarias para erradicar el problema.

En todo caso, estas acciones son igual de útiles para combatir termitas activas y prevenir su aparición en estas fechas de alto riesgo.

Por tanto, las termitas en verano representan una amenaza real que no hay que subestimar. El calor y la humedad favorecen su proliferación, y la ausencia o la relajación impide detectar a tiempo los daños. Prevenir y actuar rápido es fundamental. Realizar inspecciones periódicas, mantener la vivienda ventilada y tener a mano el contacto de Iluro Plagas resulta vital para proteger el hogar durante los meses más calurosos del año.