¿Qué comen las termitas? La respuesta a esta pregunta permite conocer mejor los hábitos alimenticios de…
Todo sobre las termitas en invierno
Los problemas con las termitas pueden ser constantes incluso en las épocas más frías del año.
Estos insectos pueden causar estragos en la estructura de edificios o en el propio mobiliario. Por eso, debemos conocer más al detalle.
¿Pueden aparecer plagas de termitas en invierno?
La temporada de termitas no tiene principio ni fin. Estas plagas dañinas están activas todo el año. Las termitas, en invierno, se pueden enterrar profundamente debajo de nuestra casa. Lo cierto es que no hibernan, pero, cuando hace frío, es probable que busquen un hogar más cálido. Y eso puede significar una mayor invasión de termitas en nuestra casa este invierno.
¿Qué ocurre con las termitas en esta época del año?
A medida que las temperaturas descienden, las termitas comienzan la búsqueda de un suelo más cálido, por lo que excavarán hasta tres pies bajo tierra o encontrarán calor dentro de los edificios. Durante los meses más fríos de anidación, las colonias de termitas pueden crecer hasta alcanzar un gran tamaño, ya que la reina de las termitas puede poner más de 1.000 huevos al día.
Las termitas, en invierno, son invitados muy hambrientos. Así, podemos ver que se alimentan constantemente sin importar la temperatura. Una vez que comienza una infestación de termitas, es difícil deshacerse de ellas. Por eso es tan importante el control de plagas de termitas en invierno.
Signos de termitas en invierno
Para sobrevivir, una termita necesita tres elementos: agua, madera y calor. En una casa con calefacción pueden satisfacer sus necesidades a la perfección. Los signos comunes de una invasión de termitas pueden ser los siguientes:
- Ver tubos de lodo. Este es uno de los signos más reconocibles. Los tubos pueden extenderse por el suelo y por las paredes. Pueden, además, indicarnos que existe el nido a poca distancia.
- Algunos signos de daño en la madera pueden hacerse evidentes en los marcos de las puertas o las ventanas (se puede ver que no cierran bien como antes).
- Encontrar alas de estos insectos por el suelo. Se trata de unas alas blancas y muy finas.
- Algunas especies pueden crear montículos muy visibles y característicos.
Si no vemos signos de actividad de termitas durante el invierno, eso no significa que las termitas estén muertas. Lo que les suceda durante los meses más fríos dependerá de dos factores: la especie y la ubicación de la colonia. La temperatura ideal para todas las especies de termitas es de 23 grados Celsius. Algunas especies responderán a los cambios climáticos de manera diferente para mantenerse vivas.
Si nos encontramos con termitas en casa, lo mejor es no tratar de matarlas con nuestros propios medios. Es importante contactar con profesionales de la desinfección y el control de plagas. Recordamos que una termita puede causar daños significativos en una casa en tan solo dos años. Esto se traduciría en tener que cambiar muchas estructuras y reemplazar muebles.
Los problemas con las termitas pueden aparecer en invierno. Por eso, es crucial poner remedio a tiempo. Ante la duda, contacta con profesionales del control de plagas. Anímate a descubrir más sobre las termiatas en nuestro blog.